sábado, octubre 22, 2011

LEYES INEXORABLES
 (Ley de Fant)

Cuando necesites abrir una puerta con la única mano libre, la llave estará en el bolsillo opuesto'   
(Ley del destino)
'La única vez que la puerta se cierra sola es cuando has dejado las llaves dentro'.
(Ley de mecánica de Loren)

'Cuando tengas las manos llenas de grasa, te comenzará a picar la nariz'.     
(Segundo corolario de Chisholm)
'Cuando las cosas parecen ir mejor, es que has pasado algo por alto'


'Si  mantienes la calma cuando todos pierden la cabeza, sin duda es que no has captado la gravedad del problema'.  
 LEY DE LA CONSERVACION DE LA MARICADA
'Los problemas ni se crean, ni se resuelven, sólo se transforman'
(Principio de Ring a Bell) 
Llegarás corriendo al teléfono justo a tiempo para oír como cuelgan'
(Ley de Queco Jones)
'Si solo hay dos programas en la tele que valgan la pena ver, serán a la misma hora'.
(Ley de Soup)
'La probabilidad de que te manches comiendo, es directamente proporcional a la necesidad que tengas de estar limpio'.
(Ley de Omay God)
Todo cuerpo sumergido en la bañera hará sonar el teléfono'.
(Ley de Ooh Shit)
'Todo cuerpo sentado en el inodoro hará sonar el timbre de la puerta'
(Ley meteorológica de Reynold también conocida como Principio de Llongueras)'

La velocidad del viento aumenta proporcionalmente al precio del peinado'.
(Cuerpos de Inteligencia)
'Todo cuerpo sumergido en el agua, terminará por cantar'
(Ley de la fatalidad irreversible)
'Cuando tras años de haber guardado una cosa sin usarla decides tirarla, no pasará más de una semana que la necesites de verdad'.
(Principio de Delay)
'Siempre que llegues puntual a una cita no habrá nadie allí para comprobarlo, y si por el contrario llegas tarde, todo el mundo habrá llegado antes que tú'.
(Teorema de la verdad absoluta)
'No te tomes tan en serio la vida, al fin y al cabo no saldrás vivo de ella'
LEYES DE LA VIDA QUE NUNCA FALLAN
 FÓRMULA PARA QUE SUENE EL TELÉFONO
1. Entre a bañarse.
2. Enjabónese bien la cabeza.

3. Cuente hasta tres.
Entonces, sonará el hijueputa teléfono.
Aquí se abren dos posibilidades:
 a) Si contesta, era un malparido equivocado
 b) Si no contesta, veinte días después se enterará que esa estúpida llamada
 era súper importante.

 FÓRMULA PARA HACER QUE LLUEVA:
1. Diga con voz de satisfacción: 'Qué día tan bonito, ojalá siga así...'
2. Lave el carro
3. Lave toda la ropa que tenga y póngala a secar
4. Organice un asado para la noche
5. Salga de su casa a pie y sin una malparida chaqueta y vera que al momentico se larga el hijo de puta aguacero
 

FÓRMULA PARA ECHARLE LIMÓN AL PESCADO
1. Ponga el pescado sobre su ojo derecho.
2. Tome un limón y exprímalo apuntando en cualquier dirección, nunca falla

FÓRMULA PARA HACER QUE PASE EL BUS:
1. Salga a coger el bus
2. Espere durante veinte minutos.
3. Cómprese un helado de esos baratos que se derriten en tres minutos y, justo cuando ponga su lengua en el malparido cono aparecerá ese gran doble HP Bus o Buseta que estaba esperando.

Nota: Se han registrado casos donde han aparecido hasta tres buses al tiempo.

domingo, octubre 16, 2011


MADURAR ES OPCIONAL



El primer día en la universidad nuestro profesor se presentó y nos pidió que procuráramos llegar a conocer a alguien a quien no conociéramos todavía.

Me puse de pie y miré a mi alrededor, cuando una mano me tocó suavemente el hombro. Me di la vuelta y me encontré con una viejita arrugada cuya sonrisa le alumbraba todo su ser.

Hola, buen mozo. Me llamo Rose. Tengo ochenta y siete años. ¿Te puedo dar un abrazo?. Me reí y le contesté con entusiasmo... ¡Claro que puede! Ella me dió un abrazo muy fuerte. ¿Por qué está usted en la Universidad a una edad tan temprana, tan inocente?, le pregunté.

Riéndose, contestó... 'Estoy aquí para encontrar un marido rico, casarme, tener unos dos hijos, y luego jubilarme y viajar'.

'Se lo digo en serio', le dije. Quería saber qué le había motivado a ella a afrontar ese desafío a su edad.

'Siempre soñé con tener una educación universitaria y ahora la voy a tener!', me dijo.

Después de clases caminamos al edificio de la asociación de estudiantes y compartimos un batido de chocolate. Nos hicimos amigos enseguida.

Todos los días durante los tres meses siguientes salíamos juntos de la clase y hablábamos sin parar. Me fascinaba escuchar a esta "máquina del tiempo". Ella compartía su sabiduría y experiencia conmigo.

Durante ese año, Rose se hizo muy popular en la Universidad; hacía amistades a donde iba.

Le encantaba vestirse bien y se deleitaba con la atención que recibía de los demás estudiantes. Se lo estaba pasando de maravilla.

Al terminar el semestre le invitamos a Rose a hablar en nuestro banquete de fútbol.

No olvidaré nunca lo que ella nos enseñó en esa oportunidad.

Luego de ser presentada, subió al podio. Cuando comenzó a pronunciar el discurso que había preparado de antemano, se le cayeron al suelo las tarjetas donde tenía los apuntes. Frustrada y un poco avergonzada se inclinó sobre el micrófono y dijo simplemente, 'disculpen que esté tan nerviosa. Dejé de tomar cerveza por cuaresma y ¡este whisky me está matando!'

'No voy a poder volver a poner mi discurso en orden, así que permítanme simplemente decirles lo que sé.'

Mientras nos reíamos, ella se aclaró la garganta y comenzó: 'No dejamos de jugar porque estamos viejos, nos ponemos viejos porque dejamos de jugar.

 Hay sólo cuatro secretos para mantenerse joven, ser feliz y triunfar.' Tenemos que reír y encontrar el buen humor todos los días. Tenemos que tener un ideal. Cuando perdemos de vista nuestro ideal, comenzamos a morir.

¡Hay tantas personas caminando por ahí que están muertas y ni siquiera lo saben!' Hay una gran diferencia entre ponerse viejo y madurar.

Si ustedes tienen diecinueve años y se quedan en la cama un año entero sin hacer nada productivo se convertirán en personas de veinte años. Si yo tengo ochenta y siete años y me quedo en la cama por un año sin hacer nada tendré ochenta y ocho años.

Todos podemos envejecer. No se requiere talento ni habilidad para ello. Lo importante es que maduremos encontrando siempre la oportunidad en el cambio.

'No me arrepiento de nada. Los viejos generalmente no nos arrepentimos de lo que hicimos sino de lo que no hicimos.

Los únicos que temen la muerte son los que tienen remordimientos.

Terminó su discurso cantando 'La Rosa'. Nos pidió que estudiáramos la letra de la canción y la pusiéramos en práctica en nuestra vida diaria.

Rose terminó sus estudios. Una semana después de la graduación, Rose murió tranquilamente mientras dormía.

Más de dos mil estudiantes universitarios asistimos a las honras fúnebres para rendirle tributo a la maravillosa mujer que nos enseñó con su ejemplo que nunca es demasiado tarde para llegar a ser todo lo que se puede ser.

No olviden que... "ENVEJECER ES OBLIGATORIO, MADURAR ES OPCIONAL."

Autor desconocido

LA ROSA

Cómo tratar a una rosa.

Juan se sentía solo, volvía a su departamento, y el silencio era el único que lo esperaba. Juan estaba triste, Juan estaba solo, muy solo. Y Juan tuvo una brillante idea:

- Compañía, eso lo que necesito, compañía. Y alegre se puso a pensar que tipo de compañía.

De chico le habían dicho que lo ideal para compañía era una rosa. También le habían advertido que las rosas tenían espinas y que si uno no era cuidadoso, en vez de disfrutar el placer de mirarlas, tocarlas y oler el perfume que emitían, podían terminar lamentándose todo el día de que la rosa era mala, que cada vez que uno se acercaba lo pinchaba a propósito con sus espinas, y otras tantas advertencias del mismo género.

Pero para Juan el riesgo valía la pena. Quería una rosa y salió a buscarla. Y cuando uno busca mucho siempre encuentra lo que busca.

Así Juan salió decidido a la calle y, oh casualidad, a la vuelta de la oficina donde trabajaba la vio, estaba ahí delante de sus ojos, como había estado ella durante meses esperándolo y mirándolo cada vez que él pasaba, pero nunca se habían cruzado miradas. Pero esta vez Juan estaba decidido a ser feliz y se acercó directamente a ella, tan directamente que la hizo temblar.

Juan la miró, y quedó totalmente embriagado y envuelto por su perfume. Juan estaba enamorado. Luego de un rato de pleno éxtasis Juan se decidió. Dio media vuelta y encaró al padre de la dama.

- ¿Cuánto cuesta?, preguntó con voz firme.

- Veinte pesos, contestó el Vendedor de Flores, sorprendido por la pregunta tan imprevista, pues ni siquiera le había dicho buen día, y agregó ya recompuesto.

- Con diez pesos más se lleva esta maceta hermosa, señalando una roja de cerámica.

A los pocos minutos Juan salía feliz del negocio con María, pues así le había puesto de nombre a la rosa. María salió alegre a la calle, en los brazos de Juan y vestida con su hermoso vestido de maceta roja.

Juan llegó a su casa, puso a María en el mejor lugar, donde podía recibir la luz de la mañana, luego guardó el comprobante de compra de la rosa y finalmente se sentó a su lado. El resto de la tarde se deleitó mirándola y sintiéndola.

Los primeros días fueron realmente una "Luna de Miel".

A la noche Juan se llevaba a María al dormitorio para tenerla al alcance de su mano.

La luna de miel entre ellos duró poco.

Una noche Juan entre sueños acercó su mano para acariciar a María y de pronto el dolor intenso y una gota de sangre salió de su dedo índice. María, con sus espinas lo había lastimado. Juan sintió que el dolor pasaba pero volvieron a su mente las advertencias: cuidado con las rosas, cuando tú quieres brindarles amor ellas te lastiman intencionalmente con sus espinas.

Al día siguiente Juan se olvidó de ponerle agua en la maceta a la Rosa, también se olvidó de ponerla al sol, y así hizo los siguientes tres días.

Fue el sábado que Juan al entrar al dormitorio la vio.

María estaba triste, sus pétalos que antes eran hermosos, estaban caídos sobre la mesita de luz y su tierra reseca.

Juan sorprendido por la actitud de María, buscó la factura de compra, pues tenía anotado en teléfono del negocio de plantas y llamó para reclamar.

- ¿Qué problema tiene con la planta que le vendí? preguntó el vendedor.

-¿Qué no la riega, ni la pone al sol desde hace tres días? preguntó el vendedor indignado.

Juan cortó, medio disculpándose por su ignorancia y se puso a regar a la rosa, pero no podía evitar recordar con bronca lo que ella le había hecho: lo había lastimado cuando el se acercó y seguramente lo había hecho con intención.

Y comenzó a regarla hasta inundarla de agua, mientras pensaba...

- Voy a inundarla bien, así no la riego por siete días.

- Voy a dejarla al sol así no necesito moverla.

Y luego Juan se fue a hacer otras cosas, sus cosas, las que eran realmente importantes para él.

Y María siguió perdiendo pétalos. Ya no emitía ningún perfume, ya no sentía la energía y la palabra de Juan, y María se dejaba morir.

Pasaron otros tres días y Juan fue a un cine solo. Durante la película vio una escena que lo conmovió, y de pronto apareció la imagen de María ante sus ojos con sus pétalos caídos. Juan sintió en el fondo de su ser que María se moría de pena, y se dio cuenta que la amaba, que extrañaba sus formas, su tersura, su perfume, y Juan salió a las corridas del cine y volvió a su casa.

Encontró a María desfalleciente, la tomó entre sus brazos, le sacó el agua en exceso de la maceta, y le habló del amor que le tenía, durante toda la noche.

A la mañana la puso al sol, le agregó un poco de fertilizante, y así la cuidó en su convalecencia que duró casi un mes.

Al mes María estaba radiante y enamorada como siempre.

Y ese día Juan tomó el comprobante de compra y rompiéndolo en mil pedacitos le dijo a María...

- Alguna vez creí, equivocadamente, que porque te había comprado y puesto el comprobante de compra bajo la maceta podía decirte - " soy tu dueño, y no te riego".

- Hoy me doy cuenta que nuestra relación se sustenta en cambio en el amor diario que nos podamos dar, en que yo te riegue todos los días con mi amor, mientras tú me llenas con tu hermoso perfume, tu tersura, tu compañía y y tu hermoso perfume.

Que todos los cuidados que yo te haya dispensado en el pasado, vivirán siempre como un maravilloso recuerdo, pero que no son suficientes para el día de hoy.

Y que a partir del día de hoy, para poder disfrutarte te seguiré regando día tras día.

Y además tendré presente que si me encuentro con tus espinas puede ser, que parte de la culpa sea mía por no saber acercarme a ti.

Autor: Dr. Dino Ricardo Deon
Extraído del libro "Los cuentos de Dino"

Y UN JOVEN DIJO
De "El Profeta"



Y un joven dijo: "Háblanos de la Amistad".

Y él respondió, diciendo: Vuestro amigo es la respuesta a vuestras necesidades.

Es vuestro campo, que sembráis con amor y cosecháis con gratitud.

Y es Vuestra mesa, y el fuego de vuestro hogar.

Porque acudís a él para saciar vuestra hambre y lo buscáis en procura de paz.

Cuando vuestro amigo revela su pensamiento, no teméis el "no" en vuestra propia mente, ni retenéis el "sí".

Y cuando él guarda silencio vuestro corazón no cesa de escuchar a su corazón.

Porque en la amistad, todos los pensamientos, todos los deseos, todas las expectativas, nacen sin palabras y son compartidos con callado gozo.

Cuando os separáis de vuestro amigo, lo hacéis sin aflicción; Porque lo que más amáis en él puede ser más diáfano aún en su ausencia, como para el alpinista la montaña aparece más despejada desde la llanura.

Y dejad que en la amistad no exista otro propósito que el de profundizar el espíritu.

Porque el amor que busca otra cosa que no sea la revelación de su propio misterio, no es amor sino una red tendida, y solamente lo inútil es pescado.

Y procurad que lo mejor de vosotros sea para vuestro amigo.

Si debe conocer vuestra bajamar, dejadlo conocer también vuestra pleamar.

Porque ¿qué amigo es aquel que tuviérais que buscar para matar las horas?

Buscadlo con horas para vivir.

Porque es misión suya llenar vuestra necesidad, pero no vuestra vaciedad.

Y que en la dulzura de la amistad haya lugar para la risa y para los placeres compartidos.

Porque en el rocío de las pequeñas cosas el corazón encuentra su mañana y toma su frescura.

Khalil Gibrán

No te rindas, AMIGO!!!



No te rindas, aún estás a tiempo de abrazar la vida y comenzar de nuevo, aceptar tu sombra, liberar el lastre y retomar el vuelo.



No te rindas, que la vida es eso, continuar el viaje, perseguir tus sueños, abrir las esclusas, destrabar el tiempo, correr los escombros y destapar el cielo.



No te rindas, por favor, no cedas, aunque el frío queme, aunque el miedo muerda, aunque el sol se ponga y se acalle el viento, aún hay fuego en tu alma, aún hay vida en tu seno.



Porque la vida es tuya y tuyo también el deseo, porque lo has querido y porque yo te quiero, porque existe el vino y el amor es cierto, porque no hay herida que no cure el tiempo.



Abrir las puertas, quitar los cerrojos, bajar el puente y cruzar el foso, abandonar las murallas que te protegieron, volver a la vida y aceptar el reto.



Recuperar la risa, ensayar un canto, bajar la guardia y extender las manos, desplegar las alas e intentar de nuevo, celebrar la vida, remontar los cielos.



No te rindas, por favor, AMIGO , no cedas, aunque el frío queme, aunque el miedo muerda, aunque el sol se ponga y se acalle el viento, aún hay fuego en tu alma, aún hay vida en tu seno.



Porque cada día es un comienzo nuevo, porque ésta es la hora y el mejor momento, porque tienes alas y puedes hacerlo, porque no estás solo y porque yo te quiero.

desconozco el autor

jueves, octubre 13, 2011

FINAL DE UN AMOR ENTERNO

Una lagrima rodo por su mejilla,
Aquella noche fría de invierno,
Al recibir la terrible y fatídica noticia,
Del final de un amor que creía eterno.
Su corazón latía con tanta fuerza,
Se respiración era rápida desenfrenada,
Sentía que la vida le robada la esperanza,
El deseo de morir de él se apoderaba.
Llegaron a su mente todos los recuerdos,
Las frases, los besos de su amada,
Pedía al cielo le ayudara a contenerlo,
 Le diera valor, el mundo se derrumbaba.
Todo se tono nublado, confuso y sin sentido,
Aun, no podía creer lo que escuchaba,
Ella había decidido partir sin darle un minuto,
Para mirarla a los ojos y decir cuánto la amaba
Cayo sentado abrazando ese libro que leía
En medio del cual una rosa el guardaba,
Esa era la única testigo del amor eterno
Que un día prometió, así seria, a su adorada.
Amor de madre. De niños creemos que mamá todo lo puede, que no siente cansancio, que no sufre... esa imagen que guardamos de ella con el tiempo no coincide con la que vemos cuando pasan los años... Entonces descubrimos que mamá también sufre, se cansa, está triste, no tiene fuerza, calla ocultando el dolor... La vemos como un héroe sobrevivir a grandes tragedias, llevarnos de la mano conteniéndonos y mostrándonos la vida siempre del lado más bello... De niños no entendemos sus lágrimas... de adultos nos preocupan... o no las comprendemos...Así como nosotros necesitamos tantas veces de la protección de esos brazos fuertes, de la comprensión de nuestros gestos o de nuestros silencios, de nuestro dolor... ella también nos necesita...Por eso debemos detenernos y observarla... abrazarla y hacer que sienta que estamos allí... que nos importa, que es valiosa... y de esta forma regresaremos a ella el más hermoso sentimiento que nos enseñó, el sentimiento que lleva paz y tranquilidad en los momentos difíciles de la vida, el que nos contiene, el que minimiza el dolor, el que nos hace luchar por nuestros sueños e ideales... pero por sobre todo nos enseña a dar sin pedir nada a cambio: El Amor.